La adversa climatología del ejercicio 2019 ha elevado las indemnizaciones del seguro de olivar a más de 21,5 millones de euros por los daños ocasionados en 80.347 hectáreas.
Durante este año, se han ido encadenando todo tipo de fenómenos climáticos extremos. Principalmente, el escaso volumen de precipitaciones ha producido importantes daños por sequía, pero también se han registrado tormentas de pedrisco –en ocasiones de gran intensidad–, heladas y gotas frías, entre otros fenómenos, según señala Agroseguro.
En efecto, en este cultivo ha sido la sequía, riesgo muy recurrente en nuestro país, la que más daños ha causado: la falta de lluvias ha afectado a los rendimientos tanto de aceituna de verdeo como de almazara, totalizando cerca de 13.000 hectáreas. Las tormentas de pedrisco, en algunos casos de gran virulencia, también han resultado especialmente dañinas y han afectado a casi 10.000 hectáreas de olivar. Entre ambos riesgos, la superficie afectada ha estado alrededor del 30% de la total asegurada.
La comunidad autónoma de Andalucía, principal zona productora de aceituna, acumula más de 19 millones de euros, de los cuales el 56,35% (10,78 millones de euros) se concentra en la provincia de Jaén. A continuación, se encuentran Extremadura, con 1,17 millones de euros, y Castilla-La Mancha, con casi 790.000 euros de indemnización.