El catedrático de la Universidad de Jaén del área de Historia Contemporánea Salvador Cruz Artacho desmitifica en su libro “Ni rebeldes, ni primitivos” la imagen estereotipada del inmovilismo y del atraso del sindicalismo agrario en Andalucía. Con dicho libro, presentado el pasado viernes en la Diputación de Jaén y que lleva por título “Ni rebeldes, ni primitivos. El sindicalismo agrario de la UGT en Andalucía y su contribución a la construcción de la democracia”, se pretende destacar la importancia del sindicalismo agrario en la construcción de un sistema democrático de convivencia.
La obra analiza el importante papel que el mundo agrario y el sindicalismo de la UGT han desempeñado en la historia de la movilización, politización, modernización y democratización de Andalucía, desafiando la percepción de los campesinos y jornaleros como rebeldes o primitivos. El autor cuestiona el mito del atraso productivo y social en las zonas rurales andaluzas, ofreciendo un análisis detallado de la evolución del sector agrario y de su estructura social a lo largo del siglo XX.
Además, examina la conflictividad agraria en Andalucía en ese periodo, poniendo especial énfasis en la reactivación de las luchas laborales a partir de finales de la década de los años cincuenta en respuesta a las transformaciones en la agricultura y su impacto en los procesos de democratización y en la creación de una cultura democrática. Igualmente, el libro subraya la especial relevancia de la provincia de Jaén en este proceso histórico destacando las movilizaciones y las protestas organizadas por las sociedades locales de obreros agrícolas.
Cruz Artacho asegura que el libro “demuestra con material empírico” que el mundo rural y la democracia no son dos mundos que parecen incomunicados, por lo que asegura que “no tiene nada que ver la realidad agraria andaluza con la imagen del atraso, del inmovilismo o de la dependencia con la que se la ha identificado”, lo que a su juicio es un discurso que no se sostiene y no responde a esos clichés.