
El Consejo Oleícola Internacional (COI) entregó hoy los Premios Mario Solinas 2025, un certamen que desde hace 25 años reconoce a los mejores aceites de oliva virgen extra del mundo, aquellos que destacan por una excepcional calidad y su compromiso con la excelencia. La ceremonia de entrega contó con la presencia de destacados representantes del sector oleícola, el jurado internacional y los premiados y finalistas.
A esta convocatoria se presentaron 130 aceites procedentes de Argelia, China, Croacia, España, Francia, Grecia, Italia, Marruecos, Portugal, Túnez y Turquía. Nueve jurados evaluaron las sensaciones olfativas, gustativas y retronasales, así como la armonía, complejidad y persistencia de cada uno, destacando en esta edición los aceites españoles que reciben 25 de los 32 galardones. También se ha reconocido la excelencia de aceites de Túnez, Italia, Portugal y Croacia.
Los aceites han sido enviados por productores individuales, asociaciones y empresas envasadoras y, según las bases del concurso, se clasificaron en las siguientes categorías: frutado verde intenso, frutado verde medio, frutado verde ligero, frutado maduro, pequeños productores y envasadores.
Para Jaime Lillo, director ejecutivo del COI, el Premio Mario Solinas demuestra que la excelencia en el aceite de oliva virgen extra no tiene fronteras: “Cada año, un jurado de prestigio internacional reconoce aceites procedentes de todo el mundo. Como organización internacional, nos enorgullece ver cómo este galardón se ha consolidado como un símbolo global de calidad”. Lillo también ha destacado que hoy más que nunca “los consumidores buscan productos que combinen sabor, salud y sostenibilidad. El aceite de oliva virgen extra encarna todos esos valores.”
Más globales e inclusivos
El concurso fue creado en 1993 en memoria del Dr. Mario Solinas, pionero en el desarrollo del análisis sensorial del aceite de oliva y figura clave en el establecimiento de los estándares internacionales de calidad adoptados por el COI desde 1986. Desde la primera edición oficial, celebrada en la campaña 2000/01, el certamen ha evolucionado para adaptarse a la transformación del sector, aumentando en número de participantes, países representados y categorías.
En sus primeras ediciones solo podían competir aceites producidos en países miembros del COI, pero desde 2007 el certamen se abrió a todos los países productores del mundo, en línea con el espíritu inclusivo y global de la organización. En 2017, se incorporaron categorías específicas para pequeños productores y envasadores, reconociendo el valor que aportan al mercado. En 2024, el COI celebró por primera vez una edición especial del Premio Mario Solinas para los aceites del hemisferio sur, adaptada a su calendario de cosecha. Tras una primera edición en Uruguay, este año Argentina será la sede. Esta decisión no solo busca fortalecer la cooperación internacional y el intercambio de buenas prácticas, sino también animar a nuevos países de la región a integrarse al COI.