La organización agraria COAG en Jaén recuerda que el sector del olivar se encuentra inmerso en una grave crisis debido a los bajos precios en origen del aceite, por lo que considera necesario la adopción de medidas estructurales urgentes que se han ido retrasando debido a la interinidad del Gobierno.
Por ello pide al nuevo Gobierno, y
en concreto al que continuará como ministro de Agricultura, Luis Planas, un
plan urgente para el sector, y reuniones de los nuevos responsables, al más
alto nivel, considerando la situación como un tema de Estado.
El secretario general de COAG Jaén y responsable del sector del aceite en
COAG-Andalucía, Juan Luis Ávila, asegura que tras un año en el que los precios
no han remontado, sino que han continuado a la baja, por debajo de los costes
de producción, “el campo ha gastado los ahorros y empieza a haber muchas explotaciones en quiebra técnica”.
Entiende la organización agraria que es “muy necesario un plan estructural
que incluya no solo al Ministerio de Agricultura, sino a otros departamentos”.
La situación con otro año de precios similar sería de crisis estructural, según Ávila,
especialmente si le sumamos que la cosecha que termina es menor a la esperada, “incluso
hay lugares donde no se ha llegado a recoger la aceituna por los altos costes
tras su caída al suelo”.
“La situación que viven las zonas netamente olivareras hacen vaticinar una gran crisis económica, social y
de pérdida de renta en estas provincias”, de ahí que desde la
organización justifican las movilizaciones anunciadas hace unos días por el
conjunto del sector y la petición al nuevo Gobierno de un plan urgente para el
sector, que no puede seguir esperando más.
El sector del aceite de oliva genera en Andalucía más de 140.000 empleos,
cuenta con más de 169.000 explotaciones agrícolas y más de 1.150 empresas
relacionadas.
A pesar de haber tenido una buena cosecha en 2018/19, los precios en origen
durante el último año han hecho que no sea rentable, según remarca.
De hecho en la primera semana de marzo de 2019 el precio en origen se
encontraba en torno a 2,35 €/kg, lo que suponía una disminución del 28%
respecto al mismo periodo del año anterior.
“A lo largo del 2019 los precios del aceite no solo no han subido, a pesar de estar recogiéndose una cosecha menor a la anterior, sino que se encuentran aún más bajos”, precisa, y recuerda que en la última semana (del 3 al 9 de enero) según el PoolRed, el precio medio del aceite se situaba a 1,85 €/kg, el virgen extra a 2,1 €/kg; el virgen a 1,75 €/kg y el lampante a 1,67 €/kg. “Precios que se encuentran por debajo del coste medio ponderado de producción de aceite de oliva en España, que según el COI (2015) es de 2,75 €/kg; 2,73 €/kg, según el estudio de AEMO (2012)”, concluye la organización agraria.