
Citoliva, junto a Andalucía Agrotech EDIH, ha celebrado esta semana (17 y 18 de septiembre) en su sede de Geolit dos jornadas de sensibilización que han congregado a más de una treintena de empresas de los sectores oleícola y tecnológico. Así, a través de diferentes ponencias y encuentros se ha profundizado en materias concretas como herramientas tecnológicas que optimizan el trabajo en el olivar; sistemas que ahondan en la previsión de cosechas y en el respeto medioambiental; cómo la digitalización está transformando la producción de almazaras o los beneficios de integrar herramientas digitales en las mismas.
El objetivo de esta convocatoria profesional era la de acercar la realidad de las explotaciones olivareras y almazaras al ecosistema digital, generando un espacio común donde identificar necesidades y diseñar soluciones innovadoras. Para Lola Jiménez, gerente de Citoliva, “hemos conseguido que el sector oleícola y el tecnológico dialoguen de tú a tú. La digitalización es una oportunidad para reforzar la eficiencia, la sostenibilidad y la competitividad de toda la cadena de valor del olivar”.
Abrió la jornada del miércoles, con la temática ‘Necesidades de digitalización agronómica del olivar’, Amador Redondo, técnico de I+D+i de Citoliva, que destacó la aportación de la entidad a la transformación digital del sector. A continuación, Salvador Pancorbo, gerente de Oleocampo, destacó, cómo el Proyecto Bicapa-Oleoproyect, desarrollado junto a Citoliva, está ayudando a optimizar el manejo del cultivo mediante una bicapa antihierba adaptada a diferentes modelos productivos.
Por su parte, Juan Carlos Cañasveras, director de Desarrollo de Negocio e I+D de Balam, presentó tres ejemplos de innovación: Hidrosostenible, un modelo que reduce consumo de agua y aumenta la producción; sistemas avanzados de previsión de cosecha; y otro de recolección nocturna en seto que minimiza el impacto sobre las aves.
La otra jornadar, dedicada a las ‘Necesidades de digitalización de la industria oleícola almazarera”, arrancó con la intervención de Raquel Costales, responsable de elaiotecnia de Citoliva, quien subrayó cómo la digitalización está transformando la producción en las almazaras. Seguidamente, Pablo Linares, responsable de Calidad de Oleocampo, expuso los beneficios de integrar herramientas digitales en la almazara. “Lo que no se mide no se puede mejorar”, afirmó, recordando que “la inteligencia humana debe seguir primando sobre la artificial”.
Posteriormente, Melchor Martínez, director de Innovación de Acesur, defendió la necesidad de una visión global de la innovación tecnológica y presentó su colaboración con Citoliva en proyectos como Smart-O-Live, que persigue la obtención de aceites de oliva más sostenibles y eficientes.
Cada una de las jornadas se cerró con la exposición de diferentes casos de éxito. El primer día participaron Jorge Blanco (Impact Manager de XFarm Technologies) y Ana Molina (CEO & co-founder Grodi), que mostraron el potencial de sensores, drones y análisis de datos para mejorar la toma de decisiones y atraer a nuevas generaciones al sector. La otra jornada contó nuevamente con Jorge Blanco (Impac Manager xFarm Technologies), Pedro Martínez, (director general de IMS), Luis Alberto Guzman (director ejecutivo de ANSOTEC), que ahondaron en las plataformas de automatización, business intelligence y analítica de datos para la industria oleícola.