“No vamos a volver a la casilla de salida de los precios de ruina en el aceite de oliva”. COAG-Jaén ha hecho un balance del año agrario y ganadero en la provincia de Jaén, en un 2024 que está a punto de finalizar. A lo largo de los últimos doce meses, el mercado del aceite de oliva ha estado marcado por las buenas salidas, llegándose a vaciar casi totalmente las bodegas.
“La banalización del aceite con la bajada del precio empobrece al olivarero español y enriquece a la industria exportadora”, asegura el secretario general de la COAG en Jaén, Juan Luis Ávila, quien añade que “con la excusa de bajar el precio de un producto que no supone un gran desembolso en el conjunto de las cesta de la compra, 30 euros por familia según los informes, se está empobreciendo a más de 200.000 familias en Andalucía y enriqueciendo a las cuatro familias que se dedican al comercio mundial del aceite”.
En este sentido, insiste en que se ha producido una bajada de precios “totalmente artificial, porque no hay datos objetivos de mercado que fuercen este descenso. Insistimos en ello y vamos a pelear para que Competencia investigue posibles acuerdos comerciales”.
De hecho, han pedido en una reunión con la europarlamentaria Carmen Crespo la eliminación del contingente de aceite procedente de Túnez, “por distorsión grave del mercado en la Unión Europea”.
“El sector debe reflexionar, a futuros, sobre si el camino que nos queda es sálvese quién pueda. Llevamos años profesionalizando la toma de decisión en la venta de una forma individualizada en las cooperativas y de una forma colectiva en los grupos de venta y debemos reflexionar si estamos consiguiendo los resultados para el que todo este movimiento se puso en marcha”, señala.
“Cuando no se tiene aceite, que es lo que le ha pasado a muchos olivareros que apenas si han tenido cosecha en los últimos dos años, multiplicar el precio que sea por cero, siempre da cero. Pero es que ahora multiplicar una buena cosecha por precios por debajo de los costes de producción, la consecuencia son deudas”, agrega.
A diferencia de lo que sucede en países como Italia donde el sector productor es capaz de llegar a acuerdos para que el aceite de oliva sea reconocido, acuerdos que los consumidores de esos países valoran positivamente, “en España volvemos a la estrategia de hundir los precios en origen para vender el aceite barato y colocarlo en el resto del mundo a precios muy superiores”, asegura.
Los precios consultados ponen de manifiesto que mientras el precio del virgen extra en España se encuentra por debajo de los 4 euros, en Grecia no bajan de 4,50 euros, en Marruecos los 8,00 euros, y en Italia los precios mínimos superan los 9 euros, según indican desde la organización agraria
COSTES DE PRODUCCIÓN
“Desde COAG Jaén hemos apostado siempre por la transparencia y la seriedad a la hora de transmitir los datos, para que el sector actúe en consecuencia y no se deje llevar por estrategias comerciales interesadas y seguimos en la misma línea. En este sentido, hemos actualizado los datos de costes de producción presentados en el balance del año de 2022. Tomando como referencia el estudio de AEMO y teniendo en cuenta, especialmente la cosecha media prevista, el coste medio de producción de un kilo de AOVE es de 4,67 euros en la provincia de Jaén”, afirma.
Precisa que la AICA (Agencia de Información y Control Alimentarios) y, por tanto el Gobierno de España, “tendrá que demostrar con hechos si la Ley de la Cadena, que establece que no se puede vender por debajo de los costes de producción, se quiere utilizar para obtener resultados o si es para simple postureo”.
Autorregulación
“Desde COAG hemos estado trabajando incansablemente para que se terminen de concretar las cifras de una herramienta aprobada en 2021, la autorregulación. Tristemente seguimos comprobando que se aprueban las normas pero luego se les deja en un limbo con una clara intención de que no sirvan para el objetivo planteado. Durante este año, desde COAG Jaén hemos trabajado y concretado propuestas basadas en las últimas tecnologías, que deben servir en los últimos meses para que la herramienta de la autorregulación sea lo más eficiente posible”, manifiesta.
AGUA
“Se están dando muchos pasos en defensa del modelo de éxito de gestión del agua que supone el olivar de Jaén. Como organización nos marcamos hace tres años una lucha por el agua, en un escenario de cambio climático, y en eso hemos estado trabajando, de forma que ya está muy avanzado el canon volumétrico, y con la Cátedra universitaria COAG-CREA de derecho Agroalimentario y Dominio Público Hidráulico, se están dando muchos pasos en defensa de un modelo más sostenible”, subraya.
PAC
En cuanto a la PAC, no hay que olvidar que “las tan cacareadas medidas del Ministerio de Agricultura, aprobadas junto a una minoría de los representantes del sector agrario, no han resuelto el gran problema de la burocracia en la tramitación de las ayudas. Complicadas de tramitar para los técnicos e imposibles de comprender en muchos casos para los agricultores, que se enfrentan a múltiples inspecciones, controles, y tramites algunas veces de difícil cumplimiento”.
Tampoco hay que olvidar que “se están cumpliendo los pronósticos sobre el recorte en las ayudas. En Andalucía han supuesto 108 millones sólo el primer año. Y en Jaén la realidad es que a todas las comarcas llega menos dinero que en la anterior PAC. Las pérdidas son más notorias en La Loma, donde los recortes son de más del 18%, en Sierra Morena (-16%) o la Campiña Norte (-14%)”.
Analizando por cultivos
“En el sector del olivar, asistimos a una cosecha con kilos pero sin rendimientos, por lo que las previsiones pueden ser bastante cercanas al aforo. Otro dato a tener en cuenta es que la producción de aceite en España se centra en Andalucía, Castilla la Mancha y Extremadura, el resto de los territorios ya habían anunciado y lo están comprobando que su producción será muy baja. Las existencias a 30 de noviembre eran en España 50.000 toneladas más bajas que en la misma fecha de 2023. Y el Ministerio en su última reunión estimaba que la producción nacional solo será un 6% superior a la media de los últimos cinco años, y que las existencias serán un 56% menor a esa media”, añade.
Lo mismo ocurre a nivel internacional. En Italia, ya ha anunciado que la caída de la producción de aceite de oliva le obligará a importar hasta el 75% del aceite que necesita para abastecer a su mercado. Turquía y Túnez van a incrementar considerablemente su producción, “aunque nos preocupa que las cifras que aportan, sobre todo en el caso de Turquía sean especialmente altas, cuando las noticias que nos llegan es que la realidad dista de ser esa. Con la previsión de cosecha de la Unión Europea cubrimos el mercado”, avanza.