El Grupo Operativo SENSOLIVE_OIL nace para dar continuidad al proyecto que hace siete años pusieron en marcha la Organización Interprofesional del Aceite de Oliva Español, el Gobierno de España y la Junta de Andalucía para buscar nuevas tecnologías complementarias al panel test a la hora de clasificar comercialmente los aceites de oliva vírgenes. La aplicación de un método instrumental sólido y fácilmente estandarizable para que cualquier empresa tenga acceso a su implementación, según se indica en un comunicado.
Todos estos años de trabajo han servido para que el campus de excelencia internacional agroalimentario ceiA3, grupos de investigación de la Universidad de Córdoba y de la Universidad de Granada identificaran tecnologías muy prometedoras y desarrollaran modelos que, partiendo de las señales instrumentales, ayuden a la clasificación de los aceites de oliva vírgenes: la cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masas y la cromatografía de gases acoplada a espectrometría de movilidad iónica.
Gracias a esta iniciativa, empresas del sector tienen la oportunidad de testar la eficacia de los modelos desarrollados para verificar las distintas categorías de aceites de oliva vírgenes en condiciones de trabajo a tiempo real. Un proyecto de innovación de grupos operativos supra-autonómicos, de la Asociación Europea para la Innovación (AEI-Agri), que se enmarca dentro del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020 y financiado con fondos FEADER (Europa invierte en las zonas rurales).
En concreto, el Grupo Operativo SENSOLIVE_OIL, cuenta con una cofinanciación de la Unión Europea del 80% de una inversión total de 518.127,06 euros. En él se integran, como miembros de la agrupación solicitante de las ayudas, la Organización Interprofesional del Aceite de Oliva Español, el campus de excelencia internacional agroalimentario ceiA3, la Universidad de Granada, y tres empresas del sector que participarán en la implementación de los pilotos (Dcoop, Sovena y Deoleo) para la validación como método de autocontrol.
Las tres empresas facilitarán muestras que pasarán por su panel de cata como paso previo a ser sometidas a la determinación instrumental y posterior clasificación. Las muestras cuya clasificación por los modelos de un resultado discordante, pasarán a ser estudiadas por los laboratorios oficiales, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía que serán miembros colaboradores del Grupo Operativo.
En el proyecto se contará con el apoyo científico de la Universidad de Córdoba como miembro subcontratado para dar asistencia técnica a los miembros. Con los resultados de la primera fase de los proyectos piloto, por una parte, se dispondrá de información para afinar los procedimientos, así como las herramientas de normalización de señales y los modelos matemáticos aplicados a cada una de las tecnologías, y por otra, servirá para validar la idoneidad de dichos modelos. El Grupo Operativo se volcará, asimismo, en la divulgación de estos avances, para que las empresas puedan seguir el avance de los pilotos y de esta forma prepararse para adoptar unas tecnologías y metodologías en las que el sector tiene puesta su esperanza.