El primer trimestre de esta campaña oleícola 2021-2022 (de octubre a diciembre) constata el adelanto de la recolección de la cosecha y una comercialización inferior como consecuencia del descenso del consumo interior y de las exportaciones de aceite de oliva respecto al último trimestre de 2020 y a dicho periodo referenciado en las cuatro últimas campañas.

Las cifras consultadas por Oleum Xauen en la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA) ponen de manifiesto que dicho adelanto de la recolección de la aceituna se deja sentir en la producción, que ha alcanzado hasta el 31 de diciembre un acumulado de 876.500 toneladas en España, lo que supone un 16 por ciento más respecto al mismo trimestre del año anterior.

La comercialización, entretanto, ha experimentado un retroceso de un 17 por ciento respecto al primer trimestre de la pasada campaña y de un 4 por ciento en comparación con el cómputo general de las últimas cuatro. Hasta el pasado 31 de diciembre España ha comercializado en el primer trimestre de esta campaña 366.300 toneladas de aceites de oliva, de las que 129.700 se han vendido en el mercado interior y 236.600 han ido a la exportación, cifras que están por debajo de la campaña anterior. Ello ha supuesto una media mensual de ventas de 122.100 toneladas.

Mientras, las importaciones hacen un acumulado en estos tres meses de 50.200 toneladas de aceites de oliva y las existencias a 31 de diciembre ascendían a 983 millones de kilos de aceites. A todo ello se une la estabilidad de precios registrada en el mercado de origen de los aceites de oliva, que oscilan entre los algo más de 2,90 euros el kilo para el lampante y los cerca de 3,40 para el virgen extra.

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