La Comisión Local de Inmigración, convocada por la Concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Martos, ha mantenido una reunión para ultimar el dispositivo de atención al trabajador temporero, que se pone en marcha cada año con motivo de la campaña de recolección de aceituna.

En esta comisión, además del área de servicios sociales, participan los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Cáritas, Cruz Roja, Centro de Salud, SAE, sindicatos y se convocan también a las cooperativas y organizaciones agrarias de la localidad.

“Aunque la fecha de apertura del albergue no se ha quedado fijada, será a partir del 22 de noviembre y una vez que se constate la necesidad de poner en marcha este servicio”, ha explicado el concejal Francisco Miranda, quien ha concretado que “este año las plazas disponibles serán 24, algo superior a las que se ofertaron el pasado año, ya que la imposibilidad de mantener la distancia de seguridad, nos obliga a reducir el aforo del albergue, aun así, gracias al ofrecimiento de Cáritas de un espacio para atender posibles contingencias, hemos podido aumentar ligeramente las plazas”.

En la comisión se ha informado que desde el día 2 de noviembre, en la estación municipal de autobuses, en horario de mañana, ya funciona el punto de información a la persona temporera, atendido por un mediador intercultural “y que el Ayuntamiento reforzará, como ya hicimos el año pasado, con un trabajador del albergue municipal, para atender a las personas no alojadas, en horario de tarde, facilitándoles billetes o informando de los recursos existentes en la localidad”.

Por otro lado, Cáritas Interparroquial prestará el servicio de cenas calientes en las nuevas instalaciones de Casa Betania que ya podrán consumirse en el local y Cruz Roja realizará salidas nocturnas para repartir kit de higiene o mantas, entre las personas que lo necesiten.

Francisco Miranda ha detallado que en esta comisión también se han presentado los datos de la anterior campaña “en la que el Ayuntamiento de Martos tuvo que correr con todos los gastos de apertura de estas instalaciones, invirtiendo alrededor de 40.000 euros para poder prestar en el alberge los servicios básicos al temporero, ya que no se contó con aportación de ninguna Administración”.

Entradas recomendadas