Las existencias de aceites de oliva en España ascendían a 526.000 toneladas a finales de mayo para afrontar el último cuatrimestre de esta campaña 2022-2023 y octubre, un mes en el que tradicionalmente la producción suele ser escasa para atender a los mercados.
Así lo ha constatado Oleum Xauen en la consulta del balance de la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), correspondiente al pasado mes de mayo. A 31 de mayo pasado había en las almazaras de España más de 263.500 toneladas de aceites de oliva; más de 255.000 estaban en poder de los envasadores y cerca de 8.000 en la Fundación del Patrimonio Comunal Olivarero.
La producción final en esta campaña en España se ha elevado hasta las 662.411 toneladas de aceites de oliva, la segunda peor de la historia en este siglo XXI, de las que algo más de 511.000 se han obtenido en Andalucía y casi 179.600 en la provincia de Jaén, el territorio mundial más productor, en una campaña que ha acusado de forma notable las adversas condiciones meteorológicas, lo que ha motivado que los precios estén en máximos históricos en el mercado de origen como consecuencia de esta escasa oferta.