Los sindicatos UGT y CC OO han presentado recurso en el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra el fallo del Juzgado de lo Social número 3 de Jaén que desestimó la demanda presentada por los sindicatos sobre la aplicación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) al convenio del campo de Jaén.
El inicio del conflicto colectivo por parte de CC OO y UGT para la aplicación del SMI al convenio del campo arrancó en abril. Desde el primer momento se manifestó por parte de ASAJA-Jaén y de la CEJ que no se estaba aplicando correctamente el Real Decreto que aprobó el SMI para 2024, posición que ha sido ratificado por el Juzgado en su sentencia.
Los sindicatos querían subir todas las categorías profesionales del convenio porque, según ellos, los más bajos quedaban por debajo del SMI del 2024. “Sin embargo, ha quedado claro que tal y como defendía ASAJA-Jaén, hay que realizar una comparativa en el cómputo anual de los salarios. De esta forma, con la subida que ha de realizarse a partir de octubre de este año, esas categorías quedan por encima del SMI, por lo que no habría que hacer la modificación que pretendían los sindicatos desde enero de este año”, aseguraba en un comunicado ASAJA-Jaén.
Actualización del convenio del campo
Esta situación se produce cuando en los próximos días toca la actualización de la tabla salarial del convenio del campo entre el 1 de octubre de 2024 y el 30 de septiembre de 2025 una vez que se conozca el dato definitivo de la tasa interanual del IPC de la provincia de Jaén para saber cuánto hay que subir la jornada salarial, cuya horquilla para este tercer año de los cuatro del convenio colectivo oscila entre el 1,5 y el 3,5 por ciento de incremento.
El convenio del campo de la provincia de Jaén, que afecta a decenas de miles de trabajadores, regula las relaciones laborales entre los trabajadores del campo y empresarios. Tiene una vigencia de cuatro años (el actual ejercicio corresponde al tercer año). El convenio regula los horarios de trabajo y demás condiciones entre empleador y empleado con el fin de garantizar la paz social en el campo y evitar los incumplimientos.