
El primer año del marco plurianual de la PAC 2023-2027 revela un impacto muy positivo en la provincia de Jaén respecto a los ecorregímenes y a la ayuda asociada al olivar con dificultades específicas y de alto valor medioambiental, según la evaluación realizada en un informe por la Cátedra Caja Rural de Jaén de Economía, Comercialización y Cooperativismo Oleícola, que ha presentado hoy los resultados definitivos del monográfico titulado: “La Política Agrícola Común (II): Ecorregímenes y Ayuda Asociada al Olivar con Dificultades Específicas y Alto Valor Medioambiental”, incluido en el Informe Anual de Coyuntura del Sector Oleícola 2024.
Un informe presentado por los profesores Manuel Parras, José Vicente Domingo y Antonio Garrido, quienes aseguran que más del 93 por ciento de los perceptores jiennenses de las ayudas se han acogido a esta nueva modalidad de ayudas de los ecorregímenes, que han captado 75 millones de euros de los 80 a los que podían optar. Además, el 49 por ciento de la superficie de olivar de la provincia de Jaén cumple con los requisitos para acogerse a la ayuda asociada al olivar con dificultades, un programa que cuenta con un total de 27 millones de euros para todo este marco comunitario.
Esta iniciativa forma parte del compromiso de la Cátedra por aportar conocimiento riguroso que contribuya a mejorar la competitividad de la oleicultura jiennense, mediante la investigación, el análisis económico y la transferencia de resultados al territorio. El informe analiza en profundidad la acogida y aplicación en la provincia de Jaén de dos de los instrumentos más relevantes de la actual PAC: los ecorregímenes y la ayuda asociada al olivar con dificultades específicas y alto valor medioambiental. Se trata de un análisis tanto a escala global como municipal, con el objetivo de evaluar la eficiencia de estos mecanismos en relación con los objetivos para los que fueron diseñados.
En palabras de Manuel Parras Rosa, director de la Cátedra, “los datos que ahora presentamos ya son definitivos, y nos permiten tener una visión mucho más precisa del impacto que han tenido estos mecanismos en el territorio. Los ecorregímenes y las ayudas al olivar con dificultades específicas no son meras medidas técnicas: tienen una dimensión política, económica y social crucial para el presente y futuro de la provincia de Jaén.”
El estudio refleja una notable diversidad en la aplicación de estas medidas en función del municipio, identifica los factores que explican estas diferencias, y plantea una evaluación de los puntos fuertes y débiles de su implantación. Esta información es esencial para adaptar futuras estrategias de desarrollo rural y políticas agrarias. Parras ha subrayado también que: “este análisis llega en un momento clave: ahora que ya se está empezando a debatir la configuración de la PAC post 2027. Jaén no puede ser una espectadora pasiva. Necesitamos plantear una hoja de ruta clara, basada en evidencias, que nos permita defender ante las instituciones europeas, nacionales y autonómicas una PAC útil para el olivar jiennense. Y eso solo se puede hacer con estudios como este.”
La presentación de este informe está dirigida a todos los agricultores y empresas relacionadas con el sector, así como a los técnicos responsables de la gestión de la PAC, tanto en administraciones como en organizaciones agrarias, cooperativas, almazaras, y al conjunto de miembros de la Cátedra.
El respaldo institucional de la Caja Rural de Jaén ha sido clave en el desarrollo de este proyecto. Su compromiso con el desarrollo del sector oleícola provincial se manifiesta nuevamente a través del apoyo a este tipo de investigaciones aplicadas, que ofrecen herramientas prácticas para la toma de decisiones en un momento de transición clave para la política agraria común. La Cátedra reafirma así su papel como espacio de colaboración público-privada centrado en la generación de conocimiento estratégico para el olivar y el aceite de oliva, sectores fundamentales para la economía, el empleo y la identidad de la provincia de Jaén.
Parras ha abogado de cara al próximo marco comunitario plurianual por el hecho de que las ayudas de la PAC, que son un complemento que supone menos del treinta por ciento de los ingresos de los olivareros en una provincia como Jaén que recibe unos 400 millones de euros anuales, se refuerce y aumente la ayuda asociada al olivar y por facilitarle la labor a los olivareros en términos de simplificación administrativa para aprovechar al máximo los ecorrégimenes.