Una amplia monografía incluida en el Informe Anual de Coyuntura del Sector Oleícola profundiza en el análisis de la oferta y de la demanda del oleoturismo en la provincia de Jaén. Dicho monográfico, elaborado por Eva Murgado y Juan Antonio Parrilla, de la Universidad de Jaén, resalta el gran potencial del turismo basado en el olivar y en los aceites de oliva, en la conjugación del sector oleícola con la actividad turística.
En las conclusiones del monográfico se indica que se han analizado algunas de las dimensiones clave que permiten caracterizar la oferta y demanda de oleoturismo en la provincia de Jaén. Desde la perspectiva de la oferta se han analizado los principales recursos turísticos que pueden visitarse en la provincia. Si bien el patrimonio oleícola existente es notable, la oferta de oleoturismo presenta debilidades importantes que deben superarse para desarrollar con éxito esta actividad turística, según señalan.
Entre las principales debilidades destacan: una oferta exigua, con poco valor añadido y de precios bajos, la escasa profesionalización del personal que presta el servicio de oleoturismo, unas almazaras poco orientadas a la actividad turística, con insfraestructuras obsoletas e inaccesibles y una deficiente estrategia de promoción de la oferta.
El análisis de la demanda ha permitido configurar un perfil general del oleoturista que se caracteriza por ser hombre, con una edad entre 35 y 65 años, nivel de estudios superiores, renta media-alta, consumidores de AOVE, que pernoctan en la zona entre 1 y 2 días y que proceden de España. La mayoría de los visitantes es la primera vez que visitan el destino turístico y suelen hacerlo en compañía de sus parejas, alojándose principalmente en hoteles.
Respecto al destino, la limpieza y la seguridad son las dos dimensiones más valoradas. A nivel general, muestran preferencia por productos turísticos con poca gente, con actividades programadas en las que se valora la calidad más que la cantidad, les gusta explorar nuevos lugares y hacer cosas diferentes cada día.
Cuando visitan la almazara, no sólo esperan poder pasear por las instalaciones, con visitas guiadas y amplitud de horarios, sino también que se puedan degustar y comprar los AOVEs que se elaboran.
Por otra parte, consideran muy importante la posibilidad de incrementar la oferta de oleoturismo con otras actividades relacionadas con las rutas por el olivar y el disfrute del paisaje de olivos, así como la posibilidad de realizar turismo cultural en la zona.
“Esto pone de relieve la importancia de reforzar el componente cultural y natural asociado al olivar y aceite de oliva como experiencia para el oleoturista”, subraya.
Entre los principales motivos para la visita destacan el enriquecimiento personal y el conocimiento sobre el proceso de elaboración y la cultura del aceite de oliva. Asimismo, se apunta la novedad turística como motivación relevante.