
La tecnología para facilitar el trabajo de los olivareros avanza en el sector agrario. UPA ha reunido a una treintena de agricultores y agricultoras, así como a técnicos e investigadores de España, Italia y Alemania en una finca de Alcalá la Real para mostrar cómo se coloca y se utiliza un prototipo de exoesqueleto, una de las herramientas que se están desarrollando en el proyecto AgRimate, financiado por la Unión Europea, que está formado por un potente consorcio de 12 socios (4 universidades, 2 entidades de investigación, 4 empresas de investigación, 2 organizaciones de agricultores) y cuenta con la participación de UPA.
La explicación a los agricultores del uso práctico del exoesqueleto ha corrido a cargo del técnico Luca Morelli, La otra herramienta a desarrollar dentro del “AgRimate”, unas gafas de realidad virtual con inteligencia artificial que le indicará al podador qué rama cortar y cómo hacerlo, aún no se ha podido presentar porque está en proceso de desarrollo.
El secretario general de UPA, y vicesecretario general de UPA Jaén, Cristóbal Cano, ha explicado que el proyecto AgRimate “tiene un doble objetivo, por un lado, cubrir una importante falta de mano de obra cualificada en todas las tareas del olivar, entre ellas la poda. Y, por otro, aprovechar la tecnología para mejorar un trabajo muy concreto, el de podador, que cada vez requiere de más formación y tecnificación”. De esta manera, Cristóbal Cano reconoce que “pretendemos transformar las tareas de poda con herramientas que utilizan las tecnologías de Realidad Aumentada (RA) y Robótica, enriquecidas con Inteligencia Artificial (IA), para beneficiar a los pequeños y medianos agricultores”.
Al respecto, David Erice, uno de los técnicos de UPA encargados del proyecto AgRimate, ha resaltado: “Las soluciones tecnológicas se basan en un módulo de inteligencia artificial capaz de aprender del conocimiento humano experto para abordar los desafíos de la poda de árboles. En el caso concreto del olivar, el proyecto desarrolla dos productos: unas gafas de realidad virtual, como asistente que ayude al podador; y un exoesqueleto que mejora las condiciones físicas del trabajo porque sirve de apoyo en las labores de poda. Y la treintena de olivareros que han estado en la jornada práctica se lo han probado, lo han utilizado y han visto, por ellos mismos, cómo les facilita las tareas porque hace que las herramientas que usan no les pesen, por lo que no hay cansancio”.
Los olivareros que han probado el exoesqueleto han coincidido en señalar la facilitad de las tareas y el poco peso que tienen que soportar a la hora de utilizar las máquinas podadoras con el uso de esta nueva solución tecnológica. “Una vez puesto es muy cómodo, te mantiene la espalda rígida y hace que la motosierra parezca una pluma, porque el exoesquelto hace que la máquina que usamos no pese prácticamente nada. Creo que es una ayuda fundamental para facilitarnos el trabajo”, ha expuesto una de las agricultoras participantes en la jornada, Nuria Fuentes. Después de la actividad en campo, que les ha resultado muy interesante a los olivareros, los investigadores de la Universidad de Berlín, Cosima Engel y Dominik Royé, llevaron a cabo varios talleres sobre comunicación, redes sociales y capacitación de trabajadores para la poda.




