Agricultura y Universidad de Córdoba avanzan en la obtención de nuevas variedades de olivo

La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, a través del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de Andalucía (Ifapa), sigue avanzando en la obtención de nuevas variedades de olivo, gracias a la colaboración con la Universidad de Córdoba. En este sentido, investigadores de ambas instituciones han analizado los trabajos encaminados a la comercialización de la variedad Sikitita. Hasta la fecha se han plantado más de 1.000 hectáreas de Sikitita, no solo en España, sino en otros países como Portugal o Estados Unidos. Esta variedad es la primera obtenida en un programa de mejora de olivo con un porte llorón especialmente adaptado al sistema de formación en seto y se enmarca en los trabajos contemplados en la colaboración entre estas entidades.

De otro lado, se ha puesto en marcha la comercialización de dos nuevas variedades Sikitita-2 y Sikitita-3. Estas variedades también están adaptadas al cultivo en seto, aunque en el caso de Sikitita-3 su vigor medio también la hace adaptada al cultivo en vaso. Las dos nuevas variedades destacan además por la composición de sus aceites y sus interesantes perfiles sensoriales. Su elevado porcentaje de ácido oleico, similar al picual, unido a un alto contenido en fenoles les confiere una gran estabilidad. Por tanto, estas dos variedades vienen a cubrir una necesidad del olivar en seto de nuevas variedades con aceites estables y diferenciados de arbequina. Se espera que en pocos meses se puedan empezar a comercializar las primeras plantas. El programa de mejora genética entre el Ifapa y la UCO comenzó a desarrollarse hace más de 25 años con el objetivo de obtener variedades adaptadas a las tendencias actuales de la olivicultura. Desde entonces, y hasta la fecha, se han evaluado más de 10.000 genotipos procedentes de más de 100 cruzamientos.

Reyes pide al presidente de la Junta un protocolo específico para garantizar la seguridad sanitaria en la campaña oleícola

El presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Francisco Reyes , ha remitido una carta al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, donde le pide “la puesta en marcha en los próximos días de un protocolo específico para la campaña de recogida de la aceituna con el que se pueda maximizar la seguridad sanitaria en todos los ámbitos”. Reyes considera que aunque el Gobierno andaluz ha aprobado recientemente una Guía de Prevención y Control del Covid-19 en las explotaciones agrarias con temporeros, “este documento elaborado por la Junta de Andalucía es para 26 cultivos y no se pueden poner al mismo nivel la judía verde, el calabacín o el melón con la recolección de la aceituna por el número de trabajadores y por la cantidad de municipios a los que afecta”.

Cuando “faltan menos de 40 días para que la recogida de la cosecha aceitunera empiece en la provincia de Jaén, agricultores, sindicatos, alcaldes y la sociedad en general estamos preocupados por una campaña que tanta importancia tiene desde el punto de vista del empleo y el económico”, apunta Francisco Reyes , quien incide en que “esta campaña tiene sus propias peculiaridades y necesitamos un protocolo que atienda las necesidades y los problemas que se pueden plantear a los trabajadores del campo y a sus empleadores, así como a los vecinos de las distintas localidades andaluzas y jiennenses que recibirán a los trabajadores temporeros”.

Al respecto, el máximo responsable de la Diputación recuerda que “si las previsiones se cumplen, la próxima campaña oleícola será buena o muy buena, lo que supondrá que lleguen hasta la provincia de Jaén un número importante de jornaleros de otras provincias y regiones españolas, y para ese momento debemos estar preparados”, toda vez que, como ya ha ocurrido en otros territorios, la presencia de trabajadores agrarios se ha convertido en uno de los orígenes de los nuevos focos de contagio de Covid-19.

Por todo ello, Reyes ha solicitado en su misiva al presidente andaluz que “dé un paso más y establezca un protocolo urgente, que se ponga en marcha de manera inmediata, y en el que, entre otras medidas, se contemple una coordinación e intercambio de información con otros gobiernos autonómicos donde se están finalizando las campañas agrícolas, como puede ser el caso de la vendimia en Castilla La Mancha y La Rioja o la fruta de temporada en Cataluña”. Además, el presidente de la Diputación jiennense considera igualmente necesario que “se incremente el apoyo económico a los ayuntamientos que cuentan con albergues temporeros, y no como ha hecho hasta ahora la Junta, que ha eliminado estas ayudas que existían en años anteriores”. Por último, en esta carta también ha solicitado que se “refuerce la atención primaria en los centros de salud durante la campaña de aceituna y se flexibilicen sus horarios para poder atender por las tardes a los jornaleros; y que se realicen de forma gratuita pruebas PCR a los trabajadores temporales agrarios que lleguen hasta los municipios jiennenses y andaluces”.

Este documento debería ser, a juicio de Francisco Reyes , “fruto de la colaboración interdepartamental de diferentes consejerías y consensuado con las organizaciones agrarias, los sindicatos y, por supuesto, con los ayuntamientos de toda Andalucía”. Para su elaboración, “y aunque no es una competencia directa de las diputaciones”, Reyes ha mostrado la “entera disposición de la Diputación de Jaén para colaborar tanto en su redacción como en su posterior desarrollo”. 

La UPA estima que el descenso de la producción mundial de aceite de oliva debería mejorar la situación de los olivareros españoles

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha hecho públicas sus estimaciones sobre la próxima campaña olivarera, para la que habrá que esperar hasta octubre.

UPA ha explicado que estamos ante una nueva reducción de la cosecha mundial, que podría situarse por debajo de los 3 millones de toneladas y supondría la tercera campaña consecutiva con reducción de cosecha. Mientras que en España aumentarán de cosecha con respecto a la campaña pasada, tanto en el resto de países europeos, especialmente en Italia y Grecia (los siguientes países europeos en volumen de producción después de España), como en los países del arco Mediterráneo se estiman importantes reducciones de la cosecha.

“En nuestro país, tras un otoño e invierno muy secos, las lluvias de la primavera dieron un respiro al sector productor. Sin embargo, el desarrollo del verano está siendo muy negativo, con olas de calor que están reduciendo día a día las estimaciones de producción de aceituna”, ha señalado el responsable nacional de Olivar de UPA, Cristóbal Cano.

Por ello, desde la UPA han indicado que “habrá que ver cómo termina el verano y comienza el otoño para saber exactamente cómo será la campaña”. En la organización creen que es posible asegurar que, incluso si las condiciones climatológicas venideras fueran excepcionales buenas, “nos encontramos frente a una campaña que difícilmente superará los 1,5 millones de toneladas”.

Otro escenario posible es el de la prolongación de las altas temperaturas a lo largo del mes de agosto y de septiembre combinado con un inicio del otoño seco. “En este caso, los árboles comenzarán a notar un gran estrés, y la cosecha total se podría reducir hasta 1,4 millones de toneladas”, ha estimado Cristóbal Cano.

En cuanto a la situación en el resto de países productores, la organización ha analizado los datos proporcionados por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) del que ha podido extraer que los países del Mediterráneo, principalmente Túnez, reducirán extremadamente sus exportaciones la próxima campaña. Por tanto, el aceite de oliva español será, de nuevo, el que copará los mercados internacionales, con previsibles reducciones de stocks gracias a unas estimaciones de aumento del consumo mundial.

“Solo falta saber si esta situación de dominio de nuestros aceites tendrá lugar con un reparto justo del valor del producto a lo largo de la cadena, o si de nuevo, el sector productor sufre precios de ruina”, han concluido desde UPA.

Sobre la campaña 2019/2020, a la que todavía falta los últimos dos meses para terminar, UPA ha afirmado que la comercialización total será de nuevo récord, por encima de 1,6 millones de toneladas, dejando que el stock final “difícilmente” llegue a las 400.000 toneladas. “Los precios en origen hundidos y la apuesta de las grandes envasadoras españolas por el aceite de terceros países serán las características negativas del balance final de la campaña oleícola”, ha sentenciado Cano.

La creación de cuadrillas estables, una de la pautas principales de la guía para temporeros frente al Covid-19 consensuada con el sector

La Junta de Andalucía, a través de las Consejerías de Salud y Familias, Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, y Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, en coordinación con los departamentos competentes en materia de sanidad y agricultura del Gobierno de España, siguen implementando actuaciones y recursos para conseguir un campo más seguro ante la situación de pandemia por el Covid-19 y el inicio de las campañas agrícolas de recolección.

Ante la situación que se viene registrando, con un incremento de casos en toda Europa y ante el riesgo constatado, entre otras, en las zonas agrícolas, las administraciones central y autonómica se han coordinado para dotar de mayores recursos a esta actividad y aumentar la seguridad. A ello responde la guía elaborada para los trabajadores del campo, que se va a ver complementada con otra batería de medidas que se van a ir concretando en esta próxima semana, así como consensuando con el sector. La titular de Agricultura de la Junta, Carmen Crespo entiende que «es fundamental que todos vayamos en el mismo barco con actuaciones que permitan evitar los riesgos».

«Las campañas agrícolas están muy cercanas en el tiempo y tenemos que conseguir que los niveles de seguridad sean los máximos y que en el caso de que se detecten contagios de Covid-19 todos los protocolos estén activados para facilitar la mejor reacción y rastreo», ha continuado afirmando la consejera de Agricultura, para quien el caso de Almería es especialmente singular porque la agricultura «juega un papel de primer orden en lo social y en lo económico».

La guía de los trabajadores del campo ha sido consensuada primero con el Gobierno de España y luego con las organizaciones agrarias, y ya ha sido publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA). En ella se especifican la pautas a seguir por los temporeros para garantizar que el COVID-19 no se propague.

Las explotaciones contarán con un Plan de Acción

Esta Guía está dirigida a los titulares de explotaciones agrícolas y ganaderas andaluzas que contratan personas trabajadoras temporales para la realización de las distintas campañas agrícolas y ganaderas. Son recomendaciones que también pueden ser utilizadas en muchos casos por el resto de trabajadores de la explotación. Entre ellas están los principios básicos de prevención frente al Covid-19, es decir, la prevención personal, la limitación de contactos, la limpieza y ventilación y, por último, la gestión de los casos.

Al tiempo, se recomienda que cada explotación elabore un Plan de Actuación Especifico frente al Covid-19. Este Plan contemplará todas las medidas que deban ser tomadas en los diferentes escenarios posibles y deberá prever la existencia continua de los materiales necesarios para su ejecución.

Además, establecerá la coordinación con los responsables de los alojamientos comunes, de albergues o de residencias temporales y con las administraciones locales o empresas de contratación de trabajo temporal.

Hay que tener en cuenta que una parte importante de la mano de obra que se emplea en las campañas tiene un carácter multicultural y migrante y que son personas que necesitan alojamientos en los territorios donde se desarrolla la campaña agraria. Son cuestiones que se han tenido muy en cuenta, además de la propia actividad laboral y de los contactos interpersonales.

Creación de cuadrillas estables

Como medida primordial establecida en la guía, se incluye un seguimiento de los temporeros entre provincias y comunidades autónomas para garantizar un movimiento seguro, estableciendo, si es preciso, periodos de cuarentena. También se fija la utilización de guantes y mascarillas en la recolección o en caso de que no sea factible el distanciamiento interpersional y tratar en la medida de las posibilidades de fijar cuadrillas encargadas de seguir en todo momento las pautas marcadas por la Consejería de Salud.

A la hora de elaborar las medidas preventivas, entre otros puntos, el titular de la explotación debe limitar las cadenas de transmisión. Por ello, es necesario partir de las ‘cuadrillas’ como un grupo de trabajo estable sobre las que pivotarían las medidas preventivas. Sus integrantes deben estar físicamente separados tanto como sea posible y los grupos no deben mezclarse entre sí. Sobre estas cuadrillas pivotarán las medidas preventivas. Las plantillas no deben mezclarse entre sí y además serán coincidentes con grupos estables de alojamiento durante la campaña.

Además de todo ello, la guía pone especial atención en los desplazamientos, en las entradas y salidas de la explotación, en el desarrollo del trabajo y en los alojamientos. Fijación de turnos, restricción de visitas, limpieza y desinfección, cartelería informativa etc. son también importantes medidas a tener en cuenta.

Gestión de sospechas y casos de Covid-19

Cuando se sospeche o se detecten casos de Covid-19, la guírecomienda que el titular de la explotación incluya en el Plan un registro con la relación de trabajadores contratados y la cuadrilla a la que pertenece así como su unidad de alojamiento. También que se facilite la solicitud de atención sanitaria como desplazados.

En el plan de actuación de la explotación se definirán los protocolos para iniciar el proceso de detección, aislamiento y control sin demora en el caso de que un trabajador presente síntomas. El propietario tendrá un registro con la relación de trabajadores y es importante que se recomiende y facilite la solicitud de atención sanitaria como desplazados, tanto si se proviene de otra provincia de Andalucía, de otra comunidad o de otro país, para tener un centro de salud asignado y un acceso a atención primaria.

Si una persona presenta síntomas de Covid-19 en los alojamientos no acudirá a la explotación hasta no contar con una valoración médica que lo permita, permaneciendo en todo momento aislada. Tampoco acudirán los trabajadores en cuarentena o que sean casos confirmados, que también se aislarán. Finalmente, se recomienda que una vez valorado como caso sospechoso se inicie la identificación de las personas con las que han convivido.

Sierra Mágina apuesta por los tratamientos terrestres para luchar contra la mosca del olivo

Los olivareros, almazaras y cooperativas de la comarca de Sierra Mágina, dentro de su apuesta por obtener los mejores aceites de oliva, mantienen como todos los años su lucha contra la plaga de la mosca del olivo, cuyo carácter es endémico en la comarca de Sierra Mágina y cuyo efecto supone un deterioro de la calidad de los aceites de oliva que se producirán en la próxima campaña.

Desde principios del mes de Julio se sitúan estaciones de control en toda la comarca que son visitadas semanalmente por el equipo técnico del Consejo Regulador de la DOP Sierra Mágina, controlando tanto la población como la picada del fruto, para determinar así el momento óptimo para realizar los tratamientos y que tengan la máxima efectividad De hecho, ya se han realizado las primeras aplicaciones en los términos de Campillo de Arenas, Cárcheles, Pegalajar y Torres.

La principal novedad de este año es que las aplicaciones de producto se van a realizar de forma terrestre, y no aérea como en años anteriores, en la búsqueda constante de una mayor efectividad. Ya el año pasado se realizaron ensayos comparativos entre ambos tipos de aplicaciones, y en base a los resultados obtenidos, se ha optado este año por realizar estas aplicaciones a toda la comarca.

Las aplicaciones terrestres están totalmente protocolizadas, y se realizan por profesionales de las diferentes zonas que son objeto de los tratamientos, y que conocen por tanto el terreno a tratar. Se realizan mediante “parcheo” de forma que el líquido incorpora un atrayente (proteína) para que el tractor no tenga que pasar por todos los olivares, sino que van haciendo franjas, y eso permite reducir los consumos y aumentar la sostenibilidad en la lucha contra la plaga. Los vehículos van equipados con localizadores para poder controlar las zonas de aplicación, y todo el proceso es verificado por el equipo técnico del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Sierra Mágina

«En definitiva, es un esfuerzo más de los agricultores, en un año con una situación de precios muy complicada, pero con la meta de lograr una mayor calidad en sus aceites que les permita diferenciarse y lograr una rentabilidad para su esfuerzo, que permita mantener la explotación de estos olivares tradicionales que conforman Sierra Mágina», aseguran desde la DO Sierra Mágina.

Juan Vilar: “La campaña próxima en España será elevada en un sector con una clara crisis de demanda”

Juan Vilar Hernández, analista agronómico internacional, consultor estratégico  y profesor permanente en excedencia de la Universidad de Jaén, analiza en esta entrevista con Oleum Xauen las previsiones de cosecha de aceite para la próxima campaña, que pronostica de elevada. Por ello, teme riesgo de colapso al existir en el sector una falta de uniformidad o adecuación entre el ámbito productor en el campo, el almazarero y el orujero. Además, afirma que en dicho sector hay una clara crisis de demanda, por lo que receta promocionar el consumo y aboga por la diferenciación, la singularización y la eficiencia sostenible.

-¿Qué pronóstico hace de la próxima campaña 2020/2021?


La campaña próxima en España será elevada, de entre 1,65 a 1,73 millones de toneladas de aceite, con todo lo que las estimaciones exigen en cuanto a prudencia, y además dándose una situación completamente nueva como es la coexistencia de la campaña y la pandemia. Esto podría incidir en la misma mediante la no disponibilidad de recursos para poder recoger toda la producción, esperemos que no ocurra, la vendimia nos ayudará a entender qué podría suceder en la campaña de recolección de aceituna. 

En cuanto a precios dado que el stock mundial podría ser de unas 750 u 800 mil toneladas, en su mayor parte de lampante, y la producción mundial podría llegar a las 3,2 millones de toneladas, con una demanda que sería del orden de 2,9 millones de toneladas, todo ello influirá en los precios de distinta forma. En cuanto al virgen extra, este por defecto de oferta en la actualidad se apreciará desde principio de campaña, comenzando en Portugal, y cediendo de forma gradual semana a semana. España se beneficiará de dichas cotizaciones durante al menos 2 meses con descenso gradual. El resto de categorías no verán modificadas su cotización, aunque muy previsiblemente el punto de inflexión más negativo en las mismas lo vivamos en septiembre de este ejercicio, y a partir de ahí mejore en pequeña medida.   

-¿Por qué teme riesgo de colapso en la venidera campaña?

Si la situación es similar a lo que se espera, existe en el sector una falta de uniformidad o adecuación entre el sector productor en el campo, el almazarero y el orujero, tengamos en cuenta que los sectores almazarero y de recolección en campo, trabajar a una capacidad 5 veces por día superior al orujero, además, mientas que las balsas ostentan una capacidad de recepción estática máxima de 6,3 millones de toneladas, y la de trabajo en 10 meses, de 6,7 millones de toneladas, ello se encuentra en desequilibrio con la previsión de 9 millones de toneladas de alpeorujo, más 1 que podría quedar de enlace, los recursos y capacidades son plenamente insuficientes,  y ello conducirá, sin lugar a dudas, a una hipotética ruptura de flujo, que podría tener unos efectos perniciosos en el sector, desde el punto de vista medioambiental, económico y social. Se necesita una adecuación de recursos y capacidades de forma urgente en el subsector de procesado de alpeorujo.         

-¿Qué recetaría para mejorar el presente y el futuro de este cultivo y de este producto tan estratégico?

El sector atraviesa por una clara crisis de demanda, la misma se ha visto atenuada en cierta medida por el deshinchado en las inversiones de plantación de olivar, siendo 2019 el único año de los 22 anteriores que descendió la superficie mundial de olivar, pero no es suficiente para que la tendencia de los precios suba, y a ello habría que sumar una maduración de mercados estratégicos como es el español, tunecino, italiano, griego portugués, y el jordano, entre otros, esto conlleva una caída de consumo en los países productores que no es compensada, ni en los pequeños productores, liderados por Estados Unidos, donde se estabiliza el consumo, ni por los no productores, que aunque evolucionan positivamente, no lo hacen de forma suficiente como para tirar de esta magnitud y superar a la producción. A ello hay que sumar un envejecimiento del consumidor tipo de aceite de oliva, y unas generaciones venideras que no cogen el testigo, el entorno no es halagüeño. 

La primera receta es promocionar el consumo, destinar todas las acciones potencialmente posible a tal fin, ello pondría el consumo a niveles similares a los de la oferta, y acabaría con el problema, manteniendo niveles de precios adecuados para todos los productores, sea cual sea su naturaleza de cultivo. No obstante, en el campo se ha de luchar por, sea cual sea el modo de cultivo, la diferenciación y singularización mediante olivares ecológicos, emotivos, biodinámicas, biorregenerativos, heroicos, olivares vivos, etc. Esto le confiere al precio una mayor robustez por la sensibilización del usuario a dichos productos, y por otro lado, siempre, buscar la eficiencia sostenible en la explotación del cultivo, ello nos proporciona niveles de coste adecuados a la situación que se vive en la actualidad en el mercado. 

Asoliva reclama al Gobierno y a la UE que negocien con EE UU la derogación de los aranceles

La Asociación Española de la Industria y el Comercio Exportador del Aceite de Oliva (ASOLIVA) considera un duro golpe para el sector la decisión de EEUU de mantener el arancel del 25% impuesto desde el pasado 18 de octubre a las importaciones españolas, un sobreprecio injusto que está causando un grave perjuicio económico al aceite de oliva español y que -hay que recordar una vez más- es consecuencia colateral de la guerra comercial que enfrenta a Washington y Bruselas por el conflicto relativo a las ayudas comunitarias al consorcio aeronáutico europeo Airbus, según recalca en un comunicado 

«Transcurridos ya diez meses de la imposición de este arancel, comprobamos con tristeza y preocupación que todas las negociaciones y esfuerzos diplomáticos emprendidos por el Gobierno de España y la UE para la derogación de este gravamen han resultado infructuosos y decepcionantes. Y no se ha resuelto nada porque, sencillamente, las gestiones emprendidas no se han encaminado a resolver la raíz del problema: la rectificación de las ayudas de la UE al Airbus para que se ajusten a las resoluciones de la OMC, tal como y está demandando EEUU. Mientras este tema no se resuelva conforme a los criterios del fallo de la OMC, las negociaciones nunca van a fructificar en la eliminación de unos aranceles que perjudican gravemente a los productos agroalimentarios españoles y, particularmente, al sector del aceite de oliva español, que se enfrenta a pérdidas millonarias al verse expulsado de facto del mercado americano en beneficio de países competidores dentro de la UE como Italia, Grecia y Portugal», asegura.

Y añade: «La prolongación del arancel del 25% al aceite de oliva supondrá en la práctica la desaparición de la marca España de los lineales de EEUU en una coyuntura, además, en la que en el sector nacional se ve azotado por una crisis sistémica provocada por un exceso de producción y unos precios bajos en origen. España no puede renunciar  a enviar sus aceites a EEUU, mercado donde nuestro país es líder desde hace seis años y que representa el 50% de todo el aceite de oliva que se consume fuera de la Unión Europea. El país norteamericano consume en la actualidad 330.000 toneladas de aceite de oliva y es un mercado al alza ya que, según pronostican los expertos, en muy poco tiempo alcanzarán un consumo anual 450.000 toneladas. España no puede de ninguna de las maneras perder ese tren». 

Agrega que con su salida de los lineales norteamericanos, España pierde un 20% de su mercado exterior, en beneficio de países competidores dentro de la UE como Italia, Grecia y Portugal, que han quedado libres de este arancel, y otros como Marruecos, Turquía y Chile. Pero las consecuencias van mucho más allá, ya que la prolongación de este arancel se traducirá también en la deslocalización de numerosas empresas, un proceso ya iniciado por algunas aceiteras que han empezado a envasar directamente en EEUU.

«Consideramos que, después de soportar un sobreprecio injusto y arbitrario en las aduanas americanas, es el momento oportuno para que el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, se tomen de verdad en serio las demandas de un sector que en sólo diez meses ha perdido un gran bocado de su mercado exterior al verse envuelto en una guerra comercial cruzada entre EEUU y la UE ajena por completo a la producción y comercialización de nuestro aceite de oliva. Esperamos que, sin más demora, tanto la UE como la Administración española luchen por los intereses del aceite de oliva español e impulsen de verdad una mesa de negociación bilateral con el Gobierno americano donde se aborden todos los temas pendientes en juego con el fin de alcanzar una solución negociada que permita la completa derogación de los aranceles, y presionando para ello, si fuera preciso, con las medidas de retorsión que Bruselas puede imponer ya, según el fallo de la OMC, hacia los productos importados del otro lado del Atlántico por las ayudas de Washington a Boeing», concluye.

Villacarrillo supera a Baeza como el municipio más productor de aceite de oliva en la actual campaña oleícola

Villacarrillo ha superado ligeramente a Baeza como el municipio más productor de aceite de oliva en la presente campaña oleícola 2019/2020 de la provincia de Jaén, el mayor territorio mundial de elaboración de aceites de oliva. Con datos a 31 de marzo, a los que ha tenido acceso Oleum Xauen, Villacarrillo ha conseguido unas 371 toneladas de aceite de oliva más que el de Baeza por cuanto en las almazaras y cooperativas del término villcarrillense se han elaborado en esta campaña casi 22.306 toneladas de aceite de oliva frente a las cerca de 21.935 obtenidas en la ciudad Patrimonio de la Humanidad. Ambos municipios pertenecen a la comarca jiennense de La Loma, la mayor productora de aceites de oliva del mundo.

Tras estos municipios se sitúa Alcalá la Real en la actual campaña oleícola, con casi 19.450 toneladas de aceite de oliva obtenidas; seguido de Villanueva del Arzobispo, con 15.251; Úbeda, con 15.129, y en la órbita cercana a los diez millones de kilos de aceites de oliva se encuentran los municipios de Peal de Becerro, Mancha Real y Cazorla.

Por el contrario, en la anterior campaña oleícola 2018/2019, en las empresas aceiteras baezanas se obtuvieron casi 38.796 toneladas de aceite de oliva frente a las casi 36.236 conseguidas en Villacarrillo, según los datos de la Delegación Territorial de Agricultura en Jaén. Por detrás de ellos se situaron Úbeda, con casi 27.551; Villanueva del Arzobispo, con 23.233; las casi 23.000 de Alcaudete y Alcalá la Real, con 21.419.

En la actual campaña 2019/2020 se han obtenido en la provincia de Jaén algo más de 395.000 toneladas de aceite de oliva frente a las más de 663.000 de la anterior. El promedio de la producción de aceite de oliva en la provincia de Jaén en los siete últimos años se sitúa en casi 494.000 toneladas, mientras que la cosecha récord provincial totaliza algo más de 750.228 toneladas, conseguido en la campaña 2013/2014.

La UNIA acoge desde mañana el primero de los cursos ofertados para el sector agroalimentario en su programación de verano en Baeza

La Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) oferta en su programación de los Cursos de Verano en la Sede Antonio Machado de Baeza (Jaén) 2 cursos y un encuentro destinados al sector agroalimentario.

Como es tradición la Sede de Baeza, de acuerdo con el compromiso con su entorno, presta especial atención a este sector y, en particular, al sector oleícola. Así se han programado los cursos Modelos agrarios sostenibles. Alternativas a la actual crisis agroalimentaria yCertificación de la calidad y sus estrategias comerciales en el sector agroalimentario andaluz. Aportaciones de la nueva IGP “Aceite de Jaén” al sector oleícola español, y el encuentroAhorro energético en el sector oleícola.

El curso Modelos agrarios sostenibles. Alternativas a la actual crisis agroalimentaria está dirigido por Roberto García, de la Universidad de Jaén, y Noelia Rodríguez, de la granja Vegatorralbabio, y se celebra del 17 al 20 de agosto. Su objetivo es proporcionar información y conocimiento sobre los tres pilares básicos que vertebran los distintos modelos de agricultura sostenible; gestión adecuada de la materia orgánica, biodiversidad y de la integración de la ganadería en la agricultura.

El encuentro Ahorro energético en el sector oleícola está dirigido por Blas Ogáyar, de la Universidad de Jaén y tendrá lugar del 26 al 28 de agosto en Albanchez de Mágina. Su finalidad es mostrar el gran potencial de ahorro energético y las posibilidades de uso de las energías renovables en la industria del sector oleícola.

Por ultimo, el curso Certificación de la calidad y sus estrategias comerciales en el sector agroalimentario andaluz. Aportaciones de la nueva IGP “Aceite de Jaén” al sector oleícola español está dirigido por Ángel Martínez, de la Universidad de Jaén, y se realizará 31 de agosto al 3 de septiembre en la Sede de Baeza. Durante el mismo se abordarán los beneficios de las figuras de calidad aplicadas a los productos agroalimentarios en las comarcas de procedencia, con especial atención a la recién reconocida IGP de Jaén; la normativa reguladora y la eficiencia en el mercado de estos sistemas de calidad.

Cristóbal Cano se presentará a la reelección de la secretaría de la UPA en Jaén en el X Congreso Provincial que se celebrará el 4 de septiembre

El actual secretario provincial de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) en Jaén, Cristóbal Cano, se presentará a la reelección de la secretaría de la organización agraria en el X Congreso Provincial previsto para el próximo 4 de septiembre en Jaén.

Cristóbal Cano ha confirmado a Oleum Xauen su decisión de volver a dirigir la UPA en Jaén otros próximos cuatro años en el cónclave previsto para el primer viernes de septiembre, que se celebrará en el Recinto Provincial de Congresos de la Institución Ferial de Jaén (IFEJA), un congreso que ha sido convocado bajo el lema «Garantía de futuro».

Parece poco probable que haya más de una candidatura en este congreso de la UPA en Jaén, aunque hasta el mismo día de su celebración se pueden presentar para pilotar el futuro de la organización agraria, que tiene como retos y como desafíos hacer frente a la situación de incertidumbre que se vive en el sector agrario y de bajos precios en el mercado de origen como asuntos que monopolizan la actualidad.